viernes, 5 de diciembre de 2008

¡llame ya! ( III )

"- hola que tal muy buenos días, con quien tengo el gusto de hablar?
- con x
- ¿usted es la señora de la casa?
( si responde si, proseguir con el speech. si responde no, pedir con ella)
- y digame, usted trabaja en su casa o fuera de ella?
- trabajo en.../ me quedo en casa
- y digame... ¿usted está conforme con su figura?... es decir, ¿está contenta con como se ve?
- si / no ( si responde si, preguntarle si tiene alguna amiga/vecina/conocida que ella sepa que no está conforme con su imagen. Si dice no, seguir con el speech)
- ¿qué es lo que no le gusta de usted que le gustaría cambiar?
( en general van a decir que les gustaría pesar menos, si dicen otra cosa, preguntar si está conforme con su talla )
- bien, digame, ¿usted trabaja sentada o parada?
( no importa la respuesta )
- ¿y cuantas libras le gustaría perder?
- x
-muy bien, le comento entonces que hoy es su día de suerte, ya que su número de teléfono ha sido especialmente seleccionado para que usted, sólo por hoy tenga acceso a una oferta espectacular que le puede cambiar la vida... ¿usted alguna vez a oido hablar de fat seltzer?
( probablemente va a decir que si, ya que FAT SELTZER es un producto muy popular en eeuu)
- perfecto. Entonces le comento que tomando fat seltzer dos veces por día usted estará bajando, más de 5 libras por semana...!"

y así sucesivamente.

Este es el speech, o discurso de venta que se usa en la venta telefónica de llamados salientes.

De eso se trataba el trabajo. De vender la ilusión de adelgazar dos kilos y medio por semana por el módico precio de 150 dólares el frasco de 4 onzas, 250, el de ocho, sin gastos de envío incluido. Porque creo, a menos que alguno sea demasiado ingenuo, que todos desde el principio sabíamos perfectamente que el producto no funcionaba.
Claro que esto no nos lo dijeron, porque para poder vender un producto, el vendedor tiene que (aunque sea superficialmente) creer en el mismo.

Así que, en aquel salón del hotel holiday inn de retiro, aquella mañana de aquel caluroso verano, ana y los tipos de traje, nos contaron sobre las bondades de aquel maravilloso empleo. El sueldo constaba de un básico de no sé, pongamos 250 pesos, con obra social incluida y luego todas las comisiones resultantes de la cantidad de frascos de fat seltzer que vendieramos mensualmente.

Es decir que practicamente el sueldo, ¡no tenía limites!

y de más está decir, que de acuerdo a lo que ellos nos dijeron, la gente es toda gorda en estados unidos, compra frascos de lo que sea por toneladas con tal de adelgazar etcetera, etcetera, etcetera.

Así que si nos interesaba el trabajo, practicamente era nuestro.

Nosotros éramos tan especiales como aquellas personas a las que llamaríamos para ofrecerles la solución de sus vidas. Así como nosotros venderíamos fat seltzer en cantidades industriales, esas tres personas nos vendían lo que podía ser el trabajo que podía ser la solución de nuestras vidas.

a los 19 años, yo era muy ingenua.

y dentro de dos días, empezaba el curso "de capacitación en ventas"

Tenía dos días para pensarlo.

4 comentarios:

Unknown dijo...

yo lo encaré pero ni ahí lo terminé. a ulyses digo.

y pasaba a agradecer los comentarios. te digo que todo bien con amy, a mí me cae bien y me gusta como canta.

un beso.

L.

johana marshall dijo...

creo que a mi también me gusta como canta.

igual ya me caia bien de antes porque a mi parecer, rescata el espiritu de la cantante reventada
onda billie holliday, que no está bueno, pero alimenta algo que en algún momento podría ser... bueno, algo.

y respecto a ulyses, yo no sé si es el mismo tipo de novela, pero ya se me está complicando con moby dick. ( es que es un libro muy de macho viste )


j.

Anónimo dijo...

Yo una vez fuí a una reunion como la tuya pero esta era para vender purificadores de agua, la cosa es ke teniamos ke llamar por teléfono y ofrecer el producto a rusia, en ruso.

Como yo sabia ruso kedé seleccionado entre miles y miles de potenciales vendendores/as; curso de capacitación, comienzo del trabajo sentadito en mi box: Hola Sr? Litvinenko! buenos dias lo llamaba para ofrecerle el nuevo purificador de agua Brita, con el ke podrá beber agua libre de cualkier impureza incluso de metales pesados como el polonio 210... etcetera etcetera etcetera.
Pero a mitad del speech tuve una epifanía y etendí de lo fraudulento de mi trabajo y le dije mire señor Litvinenko esto en realidad no sirve para una mierda asi ke voy a cortar no sin antes desearle un buen día y прил (adios en ruso).
La alegría ke sobrevino a esta renuncia fue prontamente eclipsada al leer las noticias y enterarme de su muerte por envenenamiento por polonio 210, supuestamente de manos de la KGB o su sucedánea capitalista...
Hoy me siento mucho mas ingenuo ke a mis 18 años....



PD: voy a seguir entrando a tu blog, sabelo. Sabé tambien ke llegué a él por el ultimo paraguas.

johana marshall dijo...

y yo que pensaba que comentar en blogs ajenos no servía para nada...

pobre señor litvi... (copy paste bah)